miércoles, 23 de enero de 2008

La rockola interior

Mi rockola interior amaneció con una canción extraña que ya he olvidado. Luego se modificó y puso, incansablemente, los tres discos del soundtrack de ESDLA. Luego volvió a modificarse, porque uno de mis contactos de messenger, de muy elegante gusto por cierto, tenía aquello de "Here comes the sun...". Luego estaba el taxista. El taxista. ¿Recuerdan aquel personaje de Los Simpsons que atiende la tienda de cómics, usa el pelo largo en una coleta y se viste de bermudas y playeritas? Hagan de cuenta. Pero en feo. Nada simpático. Fumaba fabulosamente. Dijo sólo dos palabras en todo el viaje: "Veinticinco" y "Pesos". Las dijo juntas. Una sola vez. Y ya.

Y llevaba aquello de Los Ángeles Negros:

"Sooooooooy como fue todo en eeeesta vida, una noche de debuuuuuuuuuuut
(varios segundos de inquietante silencio)
y despedida!".

Y todo ha sido así.

(SNIF)

No hay comentarios: