Todavía no le disculpo la última estrofa.
Pero ya veremos.
Para todo hay edad.
En la 69.G tiene el corazón una oficina donde don Nadie gana al ajedrez y los adivinos adivinan, y los Aladinos aladinan, y de propina, imagínate.
Seremos tu cordón umbilical, tu confesionario, tu pomada. Ponte los cascos en la oscuridad si te da la espalda la almohada: busca en la frecuencia modulada una coartada para alunizar.
Ven a la 69.G cuando te canses de crecer y los sueños tarden en venir, que un Debussy crepuscular toca en el dial la seguidilla de Buñuel. Déjanos jugar contigo al escondite inglés en la 69.G.
Las epidemias fueron anteayer, las arrugas son de plastilina. En la Academia del Amanecer da clases de morbo Mesalina y, en una pecera con espinas, flotan las ruinas
de los cabarés.
Ven a la 69.G cuando te canses de crecer y los sueños tarden en venir, que un B.B. King sentimental toca en el dial la sonatina de Rubén, déjanos jugar contigo al escondite inglés en la 69.G. Toca en el dial la polonesa de Chopin, vamos a soplar la raya del amanecer en la 69 .G.
Dixit de la medianoche: "Pinchi Joaquín: no escribe nada que no sea neto, aunque para los demás no pueda serlo".
(QUEMA MENOS EL AMOR, PERO AÚN CALIENTA)