sábado, 17 de enero de 2009

Un héroe y un idiota

1. El héroe es el piloto que consiguió salvar a 150 personas mediante la fina estrategia de evitar que su avión volara en cachitos cuando cayó en el río Hudson. Hay que tener suerte, buen olfato, nervios a prueba de balas, el cerebro fresco, las manos firmes, las articulaciones muy bien lubricadas... y ser, bueno, alguien nacido para salvar 150 vidas. Aplausos. Qué bonito. Qué bien. Más personas de ésas hacen falta en el planeta. Diez o veinte más al año, hombre. Nadie creería nunca que ya son demasiadas.

2. El idiota es el sujeto que medio mató de asco e indignación y risa nerviosa al país completo: Eduardo Romero Hicks, alcalde de Guanajuato, panista of course, quien, cuando el conductor más conocido de la tele nacional le preguntó qué onda con el reglamento de buen gobierno para penar los besos cachondos en la calle (y las mentadas de madre, y la mendicidad, y otras cosas ay tú tan mal vistas), salió a decir que fue "un chascarrillo". Chascarrílleme ésta, señor: es usted un panista sinvergüenza y debería cerrar el pico y mandar que se corrija lo mal hecho. ¿O qué: en Guanajuato no hay hombres que admitan que metieron la pata? ¡Ya el propio partido del señor se había lavado las manos! ¿Por qué nadie emite un edicto para meter a la cárcel a los mochos repugnantes? ¿Porque más de la mitad de los panistas acabarían matándose a mordidas dentro de los reclusorios del país, donde ya no cabe una puta alma por culpa, bueno, de gente como los panistas (y priistas y perredistas y esa canalla por el estlo)? Lo bueno del asunto es que el señor dijo que su gobierno va a explicar qué es lo inmoral que sí sanciona el reglamento. Ah, fiú.

(¿RUDO Y CURSI? NO, ¿VERDAD?)

No hay comentarios: