Robert Louis Stevenson
1850-1894
Fanny sabía que el cuerpo sería enterrado, como mucho, a las tres de la tarde del día siguiente, pues en los trópicos la descomposición comienza pronto. Estaba claro también que Louis había de recibir sepultura en el Monte Vaea, como era su deseo. No había ningún camino hasta la cima. Así pues, Fanny envió a sus sirvientes a las aldeas circundantes e hizo que pidieran a los jefes que abrieran aquella misma noche un camino hasta lo alto del monte. Al momento acudieron a toda prisa doscientos hombres, se distribuyeron por todo el trayecto de Vailima a la cumbre y se pusieron manos a la obra con machetes, picos, palas, azadas y palanquetas. Toda la noche estuvieron oyendo los habitantes de Vailima sus gritos amortiguados, el ruido de los colosos de la selva virgen al caer y las oraciones en latín que los criados samoanos de los misioneros habían aprendido. El que terminaba la parte del camino que tenía asignada subía corriendo hasta la cima para abrir un calvero en el lugar de enterramiento, o bajaba a la playa a recoger fragmentos de coral blanco y lava negra, como ante el tradicional lugar de reposo de reyes y jefes de alto rango. Entretanto, los sirvientes untaron el cuerpo de Louis con aceite de coco aromatizado con la suave fragancia del árbol Ylang-Ylang (canangium odoratum). Contrariamente a la costumbre samoana, sin embargo, no fue envuelto en finas esteras, sino colocado en un ataúd al uso europeo, que el carpintero Willis de Apia hizo aquella misma noche delante de la casa. Lloraba mientras movía el cuerpo de Louis para tomar medidas. Después pusieron a Louis su chaqueta de terciopelo y finalmente extendieron la Union Jack sobre su demacrado rostro.
Alex Capus, La otra isla.
El texto está acompañado por la foto de Simone Sassen "Monte Vaea, isla Upolu, Samoa 1987". Todo esto aparece en las páginas 216 y 217 del libro Tumbas de poetas y pensadores, una cosa lindísima; de Cees Nooteboom, editado por Siruela. Aquí, una reseña de El País sobre el texto, y otra del ABC.
Vale la pena leer este artículo sobre el epitafio de Stevenson. Además, acá aparece en inglés.
Si lo encuentras, oh lectora, lector, cómpralo, y no comas durante un mes.
Buscando información sobre Sassen he encontrado este foro de foto.
(DE VUELTA DEL MONTE ESTÁ EL MARINERO, DE VUELTA DEL MONTE ESTÁ EL CAZADOR)
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